Persona viajaba gratis estafando a Aerolíneas Argentinas

0
2572

aa

Compró 30 pasajes con tarjetas de créditos de otras personas a un costo de más de 30 mil pesos. Era tan buen pasajero que lo nombraron socio platino. Reconoció su responsabilidad pero pidió que no le quiten los puntos.

Cumplió el sueño de muchos, viajar y gratis. Pero lo hizo violando la ley porque en cada uno de sus viajes estafó a Aerolíneas Argentinas. Por ese motivo está procesado y a un paso de ir a juicio oral y público por el delito de defraudación en perjuicio de la administración pública.

Esta es la historia de un hombre de 49 años, consultor informático y traductor, que sabía cómo burlar los controles: hizo 26 viajes gratis durante cuatro años. Inclusive la empresa lo premió como socio platino de «AR-Plus» y lo incorporó en el programa Pasajeros Frecuentes. Hasta que lo descubrieron y lo denunciaron.

Martín Alejandro Fumarola compraba los pasajes a través del sitio web de Aerolíneas Argentinas. Lo hacía con tarjetas de crédito de otras personas, emitidas en el país y en el extranjero. Eran tarjetas verdaderas, el límite no había sido superado y así el sistema autorizaba el ticket. Fumarola solo ponía como verdaderos su nombre y su número de documento, los datos que le iban a pedir para tomar el vuelo. Los dueños de las tarjetas desconocían el gasto que le llegaba. Pero cuando eso pasaba era tarde porque Fumarola ya había hecho el viaje.

El acusado hacía la compra los fines de semana y por la noche, a pocas horas de tomar el vuelo, que solía ser el primero del día. En esos días y horarios no hay personas para controlar el sistema, que es automático y emite la reserva cotejando los datos de la tarjeta de crédito. Para cuando el personal llegaba y podía advertir la estafa, Fumarola ya había llegado a destino.

La Dirección Nacional de Migraciones informó a la justicia que Fumarola además tenía viajes a Panamá, Estados Unidos, Sudáfrica, Emiratos Árabes, Chile, Alemania, México, Francia, Uruguay, Bolivia y Perú. También compró pasajes en otras empresas como LAN, Lufthansa y Air Canada pero no forman parte de la causa.

Mientras que Aerolíneas no lo descubrió, consideró a Fumarola un gran cliente y lo premió como socio platino y lo incluyó en el programa de Pasajeros Frecuentes, que le permitía juntar puntos para seguir viajando, gratis. Hasta que en 2012 la empresa lo descubrió y lo puso en la «Watch List» que le prohíbe viajar por Aerolíneas o Austral.

Con todas las pruebas en su contra, el magistrado lo procesó en febrero pasado por el delito de defraudación en perjuicio de la administración pública que tiene una pena de dos a seis años de prisión y le dictó un embargo de 50 mil pesos. El fallo fue confirmado la semana pasada por la Sala I de la Cámara Federal. Así, quedó en instancias de ir a juicio oral. Ante la Cámara, la defensa de Fumarola responsabilizó a Aerolíneas: dijo que la empresa obró negligentemente por seguir vendiéndole pasajes. El tribunal rechazó los argumentos.

 

No hay comentarios

Dejar respuesta